11 de diciembre de 2010

Santos Inocentes: el Padre Ángel

Supongo que más de uno habrá tenido la sensación de que este año los Santos Inocentes han llegado con tres semanas de adelanto tras ver esto:


El acusado absuelto, a quien por aquello de respetar las tachaduras llamaremos Ángel Muñoz Bartrina, no es otro que el llamado Padre Ángel, un sacerdote (o no, vaya usted a saber) que desde hace ya más de dos décadas se dedica a transmitir los mensajes que recibe personalmente de la Virgen del Remedio (bueno, y del Demonio), a captar adeptos y, sobre todo, a recibir jugosas donaciones, tanto en persona como a través de la denominada "Junta de la Esclavitud del Sagrado Corazón de Jesús". Cosa que a lo mejor les resulta conocida, pero es que, según cuentan, el muchacho estuvo un tiempo involucrado en las famosas "apariciones de El Escorial" antes de decidir montar su propio tinglado.

Sea como sea, hace algunos años los familiares de dos de las piadosas contribuyentes a la fortuna del Padre Ángel decidieron querellarse contra él por la comisión de varios delitos de apropiación indebida y estafa. A los que pronto se acumularon otros dos delitos fiscales, porque lo que no terminó de aprender bien el Padre Ángel durante los años de su formación es la conveniencia de tener las cuentas en orden con Hacienda para asegurarse una completa impunidad.

Porque, la verdad, tal y como están las cosas lo de la estafa no va a ninguna parte. Por mucho morro que le hayan echado a la cosa y por muchos incautos a los que hayan desplumado, la legislación y la jurisprudencia españolas suelen considerar que este tipo de actividades no constituyen estafa, aunque desde cualquier otro punto de vista estos individuos sean, sin ninguna duda, unos vulgares estafadores. De hecho, el procedimiento judicial contra el Padre Ángel sufrió una serie de retrasos debidos a que el Juzgado de Instrucción competente rechazaba enjuiciarlo por estafa, aceptando solo las dos acusaciones de delito fiscal. La tenacidad de los acusadores y sus abogados logró que finalmente también se le llevase a juicio como estafador, aunque el resultado, como hemos visto, solo ha sido satisfactorio para el Padre Ángel.

Según se narra en la Sentencia,

Por María Dolores... se ha denunciado que el acusado y personas de su entorno más inmediato, valiéndose de engaños y manipulaciones, convencieron a la hermana de aquélla, actualmente fallecida, Juana María..., para que les entregase el piso de su propiedad, sito en la calle ... en Valencia, simulando la donación mediante una compraventa, toda vez que no hubo contraprestación ninguna a esa transmisión. Además, sostiene aquélla que ésta hizo donación de diversas joyas y cuadros, e incluso suscribió un préstamo ascendente a 15.245,39 euros para la adquisición de un vehículo Ford Mondeo, que se matriculó a nombre de un miembro de la Junta antes referenciada, y de cuyo pago se hizo cargo la misma.

En cuanto a la otra acusación particular, sigue diciendo la Sentencia que

Por Pedro Juan ... se ha denunciado que el acusado y personas de su entorno más inmediato, valiéndose de engaños y manipulaciones psicológicas, captaron la voluntad de su madre Ángeles ... y de él mismo mientras fue de corta edad, desde 1992 hasta 2003, y durante ese lapso temporal aquélla se desprendió de una cantidad de dinero no inferior a 36.000 euros por razón de abono de cuotas, entrega de joyas y aportaciones en efectivo.

Lo malo es que la propia Sentencia cierra ambos antecedentes de hecho diciendo que

No existe constancia de que cualquiera de estos actos dispositivos fuesen realizados por ... movida por algún engaño o manipulación psicológica, pareciendo más bien que los efectuó en pleno ejercicio de su libertad.  

Y es que, como dijo el Fiscal durante el acto del juicio,

no pido pena por estafa porque entiendo que el derecho penal no ampara a incautos

O también, como cita Javier Cavanilles en esta estupenda entrada,

curanderos, milagreros y personas que se mueven en el mundo esotérico no pueden engañar a una persona de cultura media

En consecuencia, y a pesar de que las acusaciones particulares mantuvieron su petición de condena, la Audiencia sentencia que

Los delitos de estafa o apropiación indebida imputados al acusado no han quedado en modo alguno probados, porque de las declaraciones de los testigos comparecidos, excluidos aquéllos que ejercitan la acusación particular, no se desprende que hayan sido forzados o manipulados psicológicamiente para hacer las entregas o donaciones dirigidas al acusado o a la organización de significación religiosa que se ha creado en torno suyo. Antes al contrario, todos los testigos declararon que efectuaron esas transmisiones patrimoniales de buena gana y con la finalidad de colaborar en la realización de las finalidades benéficas que inspiran la actuación del acusado y de la referida organización religiosa. Por lo que poco más puede decirse en torno a la inexistencia de los delitos de estafa o apropiación indebida que son objeto de acusación, porque los actos dispositivos de éstos no han sido movidos por el engaño. Ni siquiera quienes acusan a título particular han sido capaces de probar que sus respectivas hermana o madre actuaron engañadas o forzadas psíquicamente, porque más allá de sus aseveraciones no aparece realizada ninguna prueba al respecto, a menos que se emplee una presunción en contra del acusado, inadmisible en derecho.

Así que ya ven, el Padre Ángel ha seguido en esto los pasos de la que dicen que fue su mentora, y resulta absuelto de los delitos de estafa y apropiación indebida.

Y en cuanto a los delitos fiscales... bueno, la Audiencia no tuvo en cuenta las afirmaciones iniciales del Padre Ángel, que aseguraba que no había presentado sus declaraciones de Hacienda porque creía que como sacerdote estaba exento (sí, ese es el nivel de morro al que llega el individuo), pero sí un informe pericial según el cual es posible que la deuda tributaria que dejó de pagar en cada ejercicio fuese inferior a 120.000 euros, el límite a partir del cual el fraude se considera delito. Y si bien la Audiencia no da por buena esta cifra, dado que la propia Hacienda tampoco hizo bien sus deberes y llegó a una liquidación definitiva no tiene otro remedio que absolver al acusado en virtud del principio de presunción de inocencia.

En definitiva, que el Padre Ángel no tendrá que mudarse desde su convento de Picassent a otro establecimiento sito en el mismo término municipal. Es inocente. Un santo inocente, vamos.

Y sí, es de suponer que Hacienda siga con sus averiguaciones y acabe imponiéndole unas más que crecidas sanciones económicas. Sanciones que podrían incluso hundirle definitivamente el chiringuito, salvo que la Virgen del Remedio lo, ejem, remedie echándole una mano como ya hizo en otras ocasiones (es memorable aquella filmación de la Virgen hablando por boca del Padre Ángel para recomendar a los fieles que comprasen lotería de la Junta). O, bueno, su otro interlocutor privilegiado, Satanás.

Pero, evidentemente, quienes no van a ver ni una perra chica son los estafados, ni sus familiares. Con las leyes en la mano, lo único que pueden hacer las víctimas de este tipo de engaños (como los de los curanderos, adivinos, espiritistas y demás sinvergüenzas) es no caer en la trampa. Ojalá esta historia, como tantas otras parecidas, sirva para que muchos escarmienten, aunque sea en cabeza ajena, antes de que sea demasiado tarde.


Nota Bene: Como Ángeles hay muchos, y Padres Ángel unos cuantos, conviene aclarar quién es el fulano en cuestión. Aquí lo tienen ustedes hace unos años, en pleno éxtasis místico...






...y aquí hace unos días, en pleno... bueno, en pleno banquillo de la Audiencia Provincial de Valencia:




Las fotos proceden de aquí y de aquí, respectivamente.

2 comentarios:

  1. Alucinante... si casi es como Al Capone, que cae por defraudar a Hacienda :D :D

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  2. "curanderos, milagreros y personas que se mueven en el mundo esotérico no pueden engañar a una persona de cultura media", diciendo esto el fiscal acaba de demostrar que alguien de cultura media, como un fiscal, puede ser bien engañado.

    carlos q

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